Me es particularmente grato expresar aquí el especial agradecimiento a mi Profesora, Ada Colomer Torrent, por la calidad de sus enseñanzas, impartidas de manera tan impecable como poco habitual. En todo momento ha hecho gala de unas cualidades didácticas que quiero destacar.
Siempre está buscando el entendimiento de aquellos que presentan más dificultades para asimilarlas y su persistencia, en asegurarse de que no quedan lagunas en el alumno, para subsanarlas cuando es preciso, antes de dar por terminada su labor.